CRIANZA
No
es nada fácil, criar, desde luego los que lo hacemos es
porque nos da muchas satisfacciones. Pero no hay que olvidar,
las noches que nos pasamos sin dormir, las agujetas (que muchos
saben de lo que estoy hablando) cuando nos perdemos una exposición
muy deseada por partos o por nuestros cachorros, las vacaciones
(¿qué es esto?), Todos los días tenemos los
mismos horarios, no hay sábados, domingos, ni días
de fiestas. La vida social tampoco existe, (dado que ellos son
los que tienen nuestra agenda y no la cambian a última
hora). Esta parte no esta nada mal, porque los verdaderos amigos,
entienden que les dejes colgados en una comunión, por ejemplo.
Mis amigos Carlos e Isabel saben de lo que estoy hablando.
Por
no hablar del desgaste psicológico que tenemos con los
cachorros, cuando ellos están bien y de repente se van
para atrás, esto desde el día que nacen, hasta el
segundo o tercer mes y un largo etc...
Eso
sin meternos a comentar como nos rebanamos la cabeza, antes de
hacer una monta, que estábamos ansiosos de ver esos cachorros
y se nos hace eterno, y llegado el momento, no son lo que nosotros
esperábamos y viceversa, porque yo soy de la opinión
que hay que se objetivo, y más en nuestra casa y no todo
el mundo, cría todo bueno o todo malo, hay un refrán
que dice... al que cuece y amasa de todo le pasa.
Ósea,
que si sabemos ver nuestros defectos, podremos ir corrigiéndolos
y aprendiendo, e intentar mejorar cada día, dado que el
perro perfecto no existe... por el momento.
Que
nadie piense que criar es ganar dinero fácil, salvo que
no tenga sentimientos ni escrúpulos. A mi marido le gustan
mucho los animales, pero reconoce, que no podría hacer
ni la mitad de las cosas que hago con ellos. Siempre me ha dicho
que los perreros estamos un poco locos y somos gente rara. A mi
la verdad, me sentaba fatal... pero, según pasa el tiempo,
me he llegado a decir a mi misma, pues puede que tenga razón,
pero la felicidad mía, no creo que la tengan mucho de los
supuestos cuerdos.
Tampoco
quiero que penséis que somos unos mártires, porque
tenemos un montón de recompensas a cambio, y eso es lo
que nos hace estar metidos en este mundo. La parte más
dura, durísima y eso lo hemos vivido todos, tanto criadores,
como personas, que no lo son, pero han tenido su animal de compañía
y son amantes de los animales, es la ida de uno de ellos, te da
igual que sea adulto o cachorro, es tan doloroso, que no tienes
ningún consuelo, por mucho que llores, grites o le recuerdes,
nada te quita el vacío y la angustia que sientes por dentro.
Para
todos ellos he dedicado el apartado "En memoria". A
mi me gusta pensar, que ellos están en unas largas, muy
largas vacaciones, todos reunidos sintiéndose muy bien.
Espero que a vosotros, el que haya pasado, por esa mala experiencia,
os pueda reconfortar en algo, o intentéis verlo así..